sábado, 20 de septiembre de 2008



Ellos tienen razón.
Esa felicidad,
al menos con mayúscula,
no existe.
¡Ah!, pero si existiera con minúscula
sería semejante a nuestra breve
presoledad.


Después de la alegría viene la soledad.
Después de la plenitud viene la soledad.
Después del amor viene la soledad.

Ya se que es una pobre deformación,
pero lo cierto es que en ese durable minuto
uno se siente solo en el mundo.

Sin asideros
Sin pretextos
Sin abrazos
Sin rencores
Sin las cosas que unen o separan
y en esa sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo.


Los datos objetivos son como sigue.

Hay diez centímetros de silencio
entre tus manos y mis manos,
una frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos.



( fragmento de "soledades", Mario Benedetti )

1 comentarios:

Fabiola dijo...

Hello my friend!!
tanto que no me pasaba por aca!!

me encanto el escrito
esta precioso!!!!

espero que nos veamos el viernes,
te extraño monton

ahora me ire a estudiar

Besos

te quiero mucho